El éxito, fundamentalmente como se consiguió, en la XXX edición del Torneo de Argual, hay que analizarlo con la ILUSIÓN que se merece, por un lado, y la MESURA que se debe, por el otro.
La U.D. LOS LLANOS se presentó ante su afición de la única manera que le ha permitido la cruda realidad, fundamentalmente, económica, pero, también, de opciones de mercado.
El camino a seguir no tiene nada de extraordinario. Nada de soluciones mágicas. No. No había otra alternativa que echar mano de un compendio mayoritario de jugadores jóvenes de la casa y/o del valle, con el aderezo de aquellos otros carismáticos y referentes. De este guiso solo puede salir carácter, desparpajo, lealtad y sentimiento sin limites, sin virus de ego fantasmal y mercantilizado.
Toda, o casi toda, la afición llanense, aunque sea por NECESIDAD y no por CONVICCIÓN - que si lo es también, me consta -, aplaude esta apuesta de la Junta de Gestión de la U.D.
Futbolisticamente, la filosofía de toda la temporada, no variará mucho de la presión asfixiante sin balón - una baza importantísima para ejecutarla es la lozanía de esta plantilla - y la salida a uno o dos toques, escondiendo el jabulani al contrario, triangulando y asociándose hasta donde sea menester, que se practicó en este pasado Torneo de Argual. Los jóvenes demostraron, en su puesta en escena, maneras para defender con dignidad, en la hora del envite competicional, la naranja. En el Aceró se vislumbra FUTURO.
Y, todo ello, bajo la tutela de un entrenador - Juan Suarez YANES - joven, ilusionado, perfecto conocedor de los entresijos e idiosincrasia del entorno. De su capacidad para valorar, dar equilibrio y oportunidades, imponer retos, en definitiva, GESTIONAR, depende la creación del caldo de cultivo propicio para generar ILUSIÓN y MOTIVACIÓN.
No obstante, no resultaría justo el insuflarles un exceso de presión a esta joven plantilla. No. Hay que tener MESURA....los pies en el suelo. La competición de los puntos no es sencilla; esos campos de Dios son un infierno.
El equipo estará donde le pertenezca estar. El que da todo lo que tiene no está obligado a más. Y con ese equipo hay que ir a muerte.
La ILUSIÓN de la que hablamos no es sinónimo de éxito. No, claro que no. Pero si que es una premisa fundamental para intentarlo. Y, reitero, en el Municipal de Los Llanos sobrará, este año si, ILUSIÓN y MOTIVACIÓN.....¡pues no faltaba más!.
ACERÓ.
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